El jefe de la OMS denunció la “avaricia” de quienes piensan ya en la inyección de una tercera dosis de vacuna anticovid, cuya necesidad no ha sido demostrada científicamente, cuando buena parte del mundo espera su primera vacuna.
“Si la solidaridad no funciona, hay una palabra para explicar la prolongación de la agonía de este mundo (…), y esa palabra es la avaricia” denunció el director general Tedros Adhanom Ghebreyesus, durante un largo monólogo, repleto de cólera y exhortaciones, tras una habitual reunión con la prensa de la agencia de la ONU que dirige en Ginebra
“El abismo mundial del suministro de vacunas es irregular y desigual, algunos países, algunas regiones están encargando millones de dosis (…) cuando otros países no han podido vacunar a su personal sanitario y a los miembros más frágiles de su población”, exclamó Tedros, que ha criticado habitualmente a estos países e industriales que firman estos contratos.
El grupo farmacéutico Pfizer/BioNTech abogó el viernes por inyectar una tercera dosis de su vacuna para hacerla más eficaz, en momentos en que la muy contagiosa variante Delta provoca brotes epidémicos en Asia y Africa, y aumenta otra vez los casos en Europa y Estados Unidos.
La jefa científica de la OMS, Soumya Swaminathan, afirmó el lunes que “no hay prueba científica que sugiera la necesidad de una inyección suplementaria”, más allá de las dosis iniciales previstas.
Coronavirus en el mundo
La pandemia de nuevo coronavirus ha provocado al menos 4.028.446 muertos en el mundo desde que la oficina de la OMS en China dio cuenta de la aparición de la enfermedad en diciembre de 2019.
Desde el comienzo de la epidemia más de 186.368.360 personas contrajeron la enfermedad. La gran mayoría de los enfermos se recupera, pero una parte aún mal evaluada conserva los síntomas durante semanas o, incluso, meses.
Las cifras se basan en los reportes comunicados diariamente por las autoridades sanitarias de cada país y excluyen las correcciones realizadas a posteriori por los diferentes organismos de estadística que concluyen que la cantidad de decesos es mucho más importante.
La OMS estima incluso que si se tiene en cuenta la sobremortalidad vinculada al covid-19, directa e indirecta, el balance de la pandemia podría ser dos a tres veces más elevado que el registrado oficialmente.
Una parte importante de los casos menos graves o asintomáticos sigue sin detectarse a pesar de la intensificación del testeo en numerosos países. El sábado se registraron en el mundo 8.073 nuevas muertes y 436.321 contagios. Los países que más fallecidos registraron según los últimos balances oficiales son Brasil con 1.205, India (895) y Indonesia (826).
La cantidad de muertos en Estados Unidos asciende a 607.135 con 33.847.784 contagios. Después de Estados Unidos, los países con más víctimas mortales son Brasil, con 532.893 muertos y 19.069.003 casos, India, con 408.040 muertos (30.837.222 casos), México, con 234.907 muertos (2.586.721 casos), y Perú, con 194.249 muertos (2.078.815 casos). Entre los países más golpeados, Perú registra la mayor tasa de mortalidad, con 589 decesos por cada 100.000 habitantes, seguido de Hungría (311), Bosnia (295), República Checa (283), y Macedonia del Norte (263).
Desde el comienzo de la epidemia, América Latina y el Caribe sumaba 1.309.289 fallecidos (38.698.994 contagios), Europa 1.178.970 (55.394.178), Estados Unidos y Canadá 633.562 (35.268.020), Asia 601.193 (41.394.488), Medio Oriente 153.087 (9.631.737), África 151.180 (5.920.173), y Oceanía 1.165 (60.778). Fuente: semana.com